Thursday, April 30, 2009

La emergencia desde adentro

Mi fascinaba el nombre de mi conductor: Mohamed Musa Sani. Cuando salíamos de Yibia me dijo: ese árbol de allá queda en Níger. El árbol no se encontraba a mas de 100 metros. Mi viaje tenía como propósito reunirme con Liz, amigable australiana que llegó seguida por una nube de niños que reía con sus comentarios en Hausa, Pregunté sorprendido: “hablas hausa…?”. Ella respondió: “Llevo dos meses aprendiendo…” Equipos como el de Liz supervisan al menos tres centros de vacunación al día, cada uno con capacidad para recibir 1500 personas en una jornada. Ella y su equipo regresan frecuentemente a Katsina para recargar vacunas y asistir a las reuniones con el equipo de coordinación donde se identifican problemas comunes y desarrollan nuevas estrategias. Durante mi semana de turismo humanitario asistí a cinco de estas reuniones; empezaban a las 10 u 11 de la noche y terminaban alrededor de la una de la madrugada, al finalizar, los equipos de terreno se van al hotel a tomar una ducha, dormir un par de horas y prepararse para salir a las 430am. Los equipos se mueven tan rápido que una nueva estrategia puede ser revaluada 12 horas después de ser diseñada.  Este esquema de trabajo ha logrado que esta sea la mas grande vacunación en la historia de la organización. Cuando Liz llego a las oficinas de coordinación, dos días después de nuestra reunión, bajó sonriente del viejo Peugeot, gritó al grupo de conductores “Salam Alaikum Malamai” y me dijo: “you are still here! Great! We have to celebrate, lets have a beer immediately if not sooner…”

Saturday, April 18, 2009

Rumbo al norte

La emergencia del norte ha seguido su curso muy a mis espaldas. Los números estimados que se escuchaban al principio se han quedado cortos por mucho: Se vacunarán entre 4 y 5 millones de personas en una territorio que alberga 38 millones y que cubre el norte de Nigeria y el sur de Niger. En Nigeria, los estados mas afectados, con 700.000 vacunados, han sido Jigawa, Katsina, y Sokoto. Tenemos 98 insomnes expatriados en Nigeria y 80 en Niger, hay 31 equipos de vigilancia de pacientes y un total de 77 equipos móviles vacunando simultáneamente (si, lo se …wow!). Me cuentan que los horarios de trabajo del equipo sobrepasan todo ritmo imaginable: de 16 a 18 horas diarias bajo estrés continuo, nada de fines de semana, nada de descanso. Despiertan aún de noche, viajan por horas en medio del desierto, arman el centro de vacunación, vacunan, regresan a un lugar seguro, cargan estadísticas al sistema de información hasta entrada la noche, discuten el plan del siguiente día, duermen un promedio de cuatro horas y vuelven a empezar. En estos equipos se aconseja no tener personal novato, nadie esta en su primera misión.

Hasta hoy, el apoyo que he brindado a la emergencia ha sido verdaderamente apasionante: responder y redireccionar una llamada con una pregunta de Excel, enviar una caja de Diazepam con un expatriado. Digo hasta hoy, porque la maleta está hecha, en breve salgo por una semana a cubrir el puesto de un expatriado que no pudo mas. Viajaré en avión hasta Abuja, luego por tierra a Kano, y después directo hasta Katsina. Atravesaré Nigeria de sur a norte, en el camino dejaré atrás África negra y entraré en África árabe, por allá donde los portugueses nunca llegaron, donde se perdió tanto aventurero Británico, donde cada año el Sahara se traga un poco mas al Sahel, hasta la frontera con Niger, tierra de nadie, tierra de nómadas, tierra de los Hausa-Fulani. Mañana veré el amanecer en el cinturón de Meningitis. 

La estación de policía de Abba Road

Decenas de Okadas se pudren frente a la estación de policía de Abba Road. Al entrar recordaba las palabras de aquel viejo australiano: hasta diciembre se realizaron fusilamientos públicos en este parqueadero. Mi absoluta preparación para este evento se reflejaba en la auto-requisada de la entrada buscando el esquivo esfero azul y en mi camiseta roja con dos pollitos amarillos en el pecho. Me escoltaban tres enormes trabajadores del hospital, que estaban, si es posible, mas asustados que yo. Dije serio: Buenas tardes, necesitamos ver a jefe seccional.

Mucho antes ya estaba asombrado por la increíble variedad de eventos que habían tenido lugar desde que me desperté y que llevaron a que ese día se presentara un verdadero meltdown de la comunidad Expat. y con ella del hospital. Como siempre no puedo contar mucho, basta saber que después de las 10am todo salió mal: el generador no respondió, nos estafaron, un doctor se accidentó, llegó una emergencia grande y otra pequeña pero fatal. La Jefe de terreno, que estaba a manos llenas con tanto problema, me dijo: lo del Policía lo solucionas tu!

La oficina del jefe seccional era un mini apartamento con luz amarilla.  En un espacio de tres por dos había una nevera que soportaba un TV con la novela Nigeriana sin volumen, tapete rojo gastado, dos sofás, en la esquina mas oscura el escritorio lleno de papeles. Perezoso resonaba el ventilador en la pared. Al entrar no pude evitar disculparme; parecía que lo habíamos despertado de una larga siesta. Estaba descalzo y con la camisa abierta hasta la mitad del pecho. Llegué a la casa Expat. a las 8pm, con la cabeza llena de imágenes, el problema resuelto y una historia que no puedo contar.

Monday, April 13, 2009

La reporte se seguridad y las clases de salsa

El reporte de seguridad de los viernes se ha seguido realizando juiciosamente de 8 a 10 PM. La jefe de terreno nos informa de los secuestros en las petroleras, de los procesos de negociación del gobierno con los grupos ilegales, de los ajustes en las medidas de seguridad. El grupo de expatriados se sienta a discutir sobre las nuevas restricciones y sobre los pequeños detalles que son tan importantes para la seguridad personal: nada de rutinas, por la noche ni a la esquina, todos a aprender a usar el radioteléfono, el vendito chalequito con fe ciega. Nosotros escuchamos, asentimos, opinamos y principalmente bebemos.  Lo mas interesante de la reunión será siempre el choque de culturas que se da a su interior: por una lado tenemos la necesidad de discusión francesa, por otro, la aceptación pasiva y eficiente japonesa, mas allá el pragmatismo americano, y en medio, sirviéndose la siguiente Star, la indiferencia Latina.  Alguna vez la reunión degeneró o regeneró en una entretenida fiesta expat, donde hasta la canadiense pedía clases de salsa. La comunidad latina no se hizo rogar. La escena podría ser titulada The blind leading the blind.

Barry y los cirujanos Sagitario

Barry es un cirujano americano que nació un día después que yo, pero 30 años antes. Esta información es suficiente para planear un análisis de los expatriados con un innovador enfoque zodiacal; he visto pasar varias Géminis con sus ojos expresivos y brillantes, una carismática Aries, y extrañamente ni un solo Cáncer. En Barry veo, o quiero ver, un par de características que reconozco como propias: primero que todo es, en el mejor sentido de la palabra, torpe, cuando encuentra una mujer atractiva esta torpeza se potencia, come temerariamente todo lo que se le atraviesa, está lleno de información que solo le interesa a él, habla solo, es bien intencionado aunque algunas veces las cosas no salgan como desea y mas que todo, tiene un muy desarrollado sentido de la culpa. Ser un cirujano sagitario produce escenas de lo mas dramáticas y sentidas, como por ejemplo, hablar durante el desayuno, cabizbajo y arrepentido, sobre el cementerio mental que tiene todo cirujano con los errores que ha cometido y que jura no repetir. 

Saturday, April 11, 2009

Reporte de media misión

Hace pocos días cumplí tres meses en Nigeria, me encuentro oficialmente en la segunda mitad de mi misión. De lo mas aplicado empecé a redactar el reporte de lo acontecido, texto que se escribió peligrosamente rápido y contenía lo que he hecho y lo que me falta hacer, una breve y optimista lista de pequeñas victorias y fracasos. A la primera leída el documento se me hizo redondito y a la segunda totalmente meloso. Empecé entonces a describir la extraña forma en que pasa el tiempo, a reflexionar sobre lo aprendido, sobre las dificultades y retos, pero no, todo lo escrito se me hacía inapropiado o lo que es peor, un invento. Si fuera verdaderamente aplicado borraría todo lo escrito y diría simplemente que lo mejor y lo peor de trabajar en una misión médica es ver en vivo y en directo que el ser humano puede ser admirable y terrible.

Thursday, April 9, 2009

Monday, April 6, 2009

Foto 1: Expats parados en frente de la casa

El día de su partida cada expat toma una foto con el equipo completo enfrente de la casa, el problema, como recordarán los lectores fieles o mas desocupados, es la diferencia en los ritmos de rotación que lleva a que tengamos despedidas semanales. Por eso mismo, el interés en la foto varía entre los expatriados de largo aliento, dentro de los que me cuento, y aquellos que solo se quedan por un mes. Los que se fueron en las primeras semanas se llevaron mis mejores sonrisas, y hasta traía mi cámara para documentar tan único evento, los del segundo mes tuvieron que conformarse con una sonrisa amigable luchada contra el sueño de las mañanas. Ahora que empieza mi cuarto mes he dedicado tanto cuidado a la foto que aparezco hablando por teléfono.    

La foto mencionada merecía mayor atención; mis disculpas mas sinceras y tácitas a J, amigable doctor ortopédico que partía ese día. Al ver la foto me doy cuenta que a fuerza de las rotaciones este será siempre un grupo bastante dispar. En la fila de atrás tenemos a C, enfermera anestesióloga francesa que realizó su primera misión en las hambrunas de Etiopia durante los 80s. Pelo canoso, despeinada y fumando. A su lado tenemos a  S, atractiva y llena de energía. Pertenece a esa buena estirpe de mujeres que llega a una piscina y no se preocupa por el pelo o el bronceado, simplemente se quita la camisa y se lanza.  Su frase: “no creemos en God, creemos en Log (logistcs)...”. A su derecha está L, risueña, y ojerosa, es una de las tantas personas que he conocido a quienes la organización ha tomado control de toda su vida: ha pasado por siete misiones, por vivir tanto tiempo en oriente medio su acento francés parece Belga, tiene novio en la organización y ahora es jefe de terreno. En el centro de la segunda fila está N, recién llegado y proveniente de Nueva Delhi. Es gigantesco, ocupa un cuarto de la foto, el chaleco parece un moño alrededor de su cuello, parado a su izquierda apenas le llego a los hombros. Es el reemplazo de J quien se encuentra a su derecha riendo satisfecho, siempre perfumado y bien vestido, al día siguiente aterrizará en Lyon para estar con sus dos nietos y un tercero que nacerá en dos semanas. Tiene un trabajo fijo en un hospital de la ciudad y en su tiempo libre se va por el mundo a hacer misiones. Su frase: “Penélope Cruz, uh-la-la…” y “si pasas por Lyon, no dejes de llamarme…“

Saturday, April 4, 2009

Angelina y Brad aterrizando en Nigeria...

Todas las semanas desde Abuja llega un correo titulado “Movements”, contiene los viajes que se realizarán en el país durante una semana. Es una lista que puede ser bastante larga, y nos ayuda a enterarnos de los especialistas que vendrán, de los viajes del equipo de coordinación, y muy especialmente de la llegada de nuevos expatriados a la misión. Nos sentamos en frente de la pantalla preguntándonos si alguien llamado Navjot será del Cáucaso o de Islandia, será hombre o mujer, será amigable o antipático. A los 4 días nos enteramos que es de la India, y que necesitamos un sastre urgentemente porque los trajes del cuarto de cirugías no le quedan a un dulce hombre de 150 kilos.

El “Movements” de esta semana tenía un primer renglón bastante peculiar: Angelina y Brad  aterrizando en Nigeria para visitar todas las misiones de la organización. El rumor corrió como reguero de pólvora. La comunidad japonesa saltaba, literalmente saltaba. La comunidad Nigeriana los veía algo asombrados sin entender a que se debía el escándalo Nipón. Mi asistente preguntaba pero quién es Angelina? Los Japoneses no alcanzaban a tomar aire para explicarle. La comunidad gringa reía satisfecha. Los franceses disimulaban su emoción. La brevísima comunidad latinoamericana estaba algo escéptica: Para qué va a venir Angelina a estas tierras? No es que el conflicto del Delta del Niger esté en la primera página del NYtimes. Pero muy dentro de mí quería estar equivocado, quería la foto con Brad, quería ver la foto y reírme, quería la historia para contarla, pero también quería estar en un lugar en el mapa, un lugar que saliera en la prensa, un lugar que visitara Angelina. 

Thursday, April 2, 2009

El héroe se esfuerza por ser sincero

En la misma cuadra de la casa expats se encuentra el Hotel Beverly Hills, pretencioso nombre para un Hotel situado en una esquina del mundo donde las mas modestas colinas son inexistentes. Algunas veces me pongo mi chalequito y me siento en el pool bar a ver CNN, disfrutar del aire acondicionado y del Internet inalámbrico. El otro día fui interrumpido en mi feliz soledad por un total extraño quien me soltó sin ninguna clase de preámbulo la siguiente bomba: Disculpe, qué lo llevó a unirse a la organización…?

Me quedé
mirándolo preguntándome qué tiene mi cara para que siempre me termine ganando gente con tan poco sentido de la privacidad. Cuando ya tomaba aire para educadamente evitar que el desconocido incurriera en este tipo de errores en el futuro, pensé de repente: qué buena pregunta. Guarde silencio pensativo. Este extraño jamás me juzgaría y si lo hacía igual no me importaba. Seamos sinceros, pensemos en la verdadera respuesta: Qué hago en la organización? Después de un par de segundos respondí seguro y alegre: “…no tengo la mas mínima idea del porqué me uní a la Organización…de hecho no tengo ni idea de qué hago en esta parte del mundo…” El extraño me miró callado, buscaba desesperadamente agarrarse de alguna arista de mi argumento para seguir la conversación, pero no la encontraba.