Sunday, February 15, 2009

Dr. D

Saliendo del Toby Jog Pub un hombre se me acercó; estaba repartiendo volantes para una fiesta y le gustaría enormemente si “ustedes los doctores” asistieran. A propósito, tengo un hueso en una posición extraña en este hombro. Sin pensarlo dos veces puse mi dedo índice sobre el hombro del paciente. Sentencié reflexivo y muy serio:

D: si, tiene razón, ese hueso esta raro... (nótese en lenguaje técnico ortopédico)

Paciente: tengo ganas de operármelo...

D: (mano derecha al mentón, breve paso atrás, mirada incisiva...) Hombre, pero le duele?

P: doler...no, no, para nada

D: (Breve silencio. Brazos cruzados, mirada relajada, tono resuelto y sin sombra de duda, trasmitiendo al paciente confianza, tranquilidad y control...) pues si no le duele no creo que deba operarse...

P: Muchas gracias Doctor, los esperamos en la fiesta!

Solo tres pasos después ya estaba pensando en el peligro que mi existencia representa para la salud de la gente confiada del común. No se imaginan el alivio cuando en la casa Rachel y Takashi estuvieron de acuerdo con mi diagnostico.

No comments:

Post a Comment