La fiesta nigeriana…

Ayer fuimos a Cheers un bar cercano a la casa. Era el cumpleaños de Lisa (US), la jefe de enfermeras. Todos los expatriados con sus uniformes, chalecos, brazaletes, caminando por la calle oscura. El bar estaba parcialmente vacío, algunos rusos y otras nacionalidades. Hombres solos. Al rato empezaron a llegar prostitutas nigerianas. Altas muy altas y vestidas con colores vivos.

Cris(Nig) saco a bailar a Lisa(US), Lionel(Fr) saco a Misao(Jap), Mat(US) sacó a Delphine (Fr). fueron los primeros en la pista de baile, que poco después estaba llena de gente. La escena tenía un gran sentido de inocencia. Nadie estaba detrás de nadie, nadie buscaba nada de nadie, todos bailaban perfectamente mal.  De repente una enorme prostituta nigeriana vestida de Amarillo empezó a bailar en el espacio entre nosotros y la pista de baile. Se movía lenta y sensualmente. Intentaba llamar la atención de algún cliente.  La escena contrastaba con la torpeza de los expatriados detrás de ella.

Al poco tiempo llegó a la mesa la suyah. Comida callejera que proviene del norte; tierra de los Hausa.  Puede escogerse entre carne de pollo, hígado, o vaca. La Suyah se cocina en la calle, en platones de hierro repletos de carbones al rojo vivo. El cocinero rocía con aceite la carne ensartada en pinchos, la pone sobre un papel periódico, esparce pimienta roja en abundancia, cebolla roja y unos pocos tomates. Al comer Suyah se debe estar preparado para sentir un enorme golpe de picante que generalmente se acalla con cerveza Star.